La sombra de la duda se proyecta sobre la Bolsa española
Análisis, 10 de marzo de 2016
Por quinto mes consecutivo, la Bolsa española presentaba en febrero un balance negativo de los volúmenes de renta variable negociados, al caer éstos un 25,3% en comparación con el mismo mes de 2015.
Aunque el número de transacciones durante el mes de febrero ha sido de 5,4 millones, un 3,0% más en relación a febrero de 2015, y el volumen negociado haya alcanzado los 60.411 millones de euros, el acumulado de los dos primeros meses de 2016 muestra un descenso del 22,9% con respecto a los volúmenes negociados en conjunto en enero y febrero de 2015, mientras que el número de negociaciones acumuladas hasta febrero asciende a 10,6 millones, un 13,0% inferior al registrado en el mismo período del ejercicio pasado.
Pese a que el mal comportamiento que reflejan los datos, se produce en un entorno global de bajos volúmenes de negocio que afecta a las bolsas europeas -Francia (-6,2%), Italia (-11,1%), Alemania (-8,6%), UK (-3,4%)- lo cierto es que las cifras de la Bolsa española son peores que las del resto de las europeas, lo que da pie a interpretar que existe un cierto rechazo al mercado español causado, bien por la incertidumbre política española, bien por la exposición a Brasil o bien por las sempiternas dudas con respecto a parte del sector bancario español.
La percepción de los mercados sobre la Bolsa española, se produce en un momento en que se están generando en el sector europeo movimientos de concentración de los mercados de valores y sistemas financieros, y que en España está representada por la sociedad Bolsas y Mercados Españoles (BME).
En este caso, los movimientos se circunscriben a la norteamericana Intercontinental Exchange (ICE) que hace unos días anunciaba su interés por adquirir la London Stock Exchange (LSE), lo que podría frustrar los planes de fusión que están en marcha entre la LSE y la bolsa de Fráncfort, Deutsche Boerse.
Aunque BME es un operador de menor tamaño, en comparación con estos gigantes europeos, no deja de ser una compañía especialmente atractiva en este proceso de concentración que parece haberse generado con fuerza entre los operadores bursátiles.
